El Colegio de Dentistas insiste en el cumplimiento de las 3M para frenar la propagación de la COVID-19: mascarilla, manos y metros
- viernes, 31 de julio de 2020
Lanza
una serie de consejos para disfrutar de una buena salud bucodental en verano
Este verano es excepcional. El
Colegio Oficial de Dentistas de Cádiz recuerda que la situación sanitaria
provocada por la Covid-19 hace obligatorio el uso de la mascarilla para
prevenir contagios. “Es una irresponsabilidad con nulo soporte científico
atribuir a las mascarillas posibles problemas bucodentales como halitosis,
caries, tinciones en los dientes o boca seca.
De hecho, los profesionales
sanitarios llevan décadas utilizándolas y no se han detectado las patologías
antes mencionadas”, según señala el presidente de CODC, el Dr. Ángel Carrero
Vázquez. En este sentido, se insiste en la importancia de cumplir la regla de
las 3 M, puesto que, hasta el momento, son las únicas medidas que han
demostrado ser eficaces para evitar la propagación del SARS-CoV-2: Manos:
lavado frecuente. Mascarilla: uso obligatorio. Metros: mantener la distancia
social.
Asimismo, facilita una serie de
consejos para disfrutar de una buena salud bucodental este verano. La llegada
de las vacaciones supone un cambio en la rutina habitual de las personas:
desaparecen los horarios, se pasan muchas horas fuera de casa, se modifican los
hábitos alimenticios y se suele relajar la higiene bucodental. Para evitar que
la salud oral empeore durante la época estival, el Colegio Oficial de Dentistas
de Cádiz aporta una serie de recomendaciones.
1. Cuidar la higiene bucodental:
aunque sea más complicado por el cambio de rutina, hay que cepillarse los
dientes, al menos, 2 veces al día (durante 2 minutos cada vez) con pasta
fluorada y usar seda o cepillo interdental por la noche. Conviene señalar que,
debido a la situación sanitaria actual, es imprescindible cuidar el cepillo de
dientes: lavarse bien las manos antes y después de usarlo, limpiarlo,
desinfectarlo con un colutorio, enjuagarlo y secarlo, mantenerlo protegido en
su capuchón, no compartirlo nunca, alejarlo del sanitario (para evitar posible
contaminación) y no almacenarlo junto a otros cepillos. Cuando no sea posible
cepillarse los dientes, se puede mascar chicle sin azúcar con xilitol durante
20 minutos, ya que produce saliva y ayuda a la limpieza, pero nunca sustituye
al cepillado.
2. Hidratarse: beber mucha agua es
fundamental para contrarrestar la pérdida de líquidos que se produce por la
sudoración. La sensación de boca seca es el primer signo de deshidratación. Se
aconseja beber 2 litros de agua al día.
3. Alimentarse de forma saludable:
una dieta sana se basa en el consumo de frutas, verduras, legumbres, pescados y
aceite de oliva, evitando las comidas copiosas y procesados. Asimismo, se debe
reducir al mínimo la ingesta de alcohol y evitar el tabaco.
4.
No abusar de las bebidas carbonatadas: su gran contenido en azúcar daña
los dientes, por lo que hay que tratar de disminuir su consumo. Además, la
mayoría son ácidas y pueden perjudicar el esmalte dental.
5. Precaución con el deporte: en
vacaciones se suele practicar más ejercicio al aire libre, por eso es cuando
más traumatismos dentarios se producen. En el caso de los niños, aumentan cerca
de un 30%. Por este motivo, se recomienda utilizar un protector bucal durante
la práctica de deportes de contacto. En caso de fractura dental hay que
conservar el diente en suero salino, agua o leche, o debajo de la lengua en
caso de no disponer de lo anterior, y llamar inmediatamente a un dentista para
poder llevar a cabo el tratamiento más adecuado.
6. Cuidado con el cloro: el cloro
altera el pH de la boca, favoreciendo la desmineralización de los dientes. En
el caso de practicar natación de manera profesional o pasar muchas horas en la
piscina, el dentista puede indicar el uso de un colutorio específico, además de
cepillarse los dientes con pasta fluorada.
7. No abandonar los tratamientos:
las férulas de descarga para el bruxismo o las de ortodoncia deben seguir
usándose durante las vacaciones. Si no se utilizan las horas recomendadas por
el dentista, es posible que dejen de ajustarse y habrá que hacer unas nuevas.
8. Proteger los labios: al igual que la piel del resto del cuerpo, hay
que proteger los labios de la excesiva exposición al sol con un fotoprotector
adecuado para evitar que se quemen.